Yoga, footing, lectura.
¿Qué tienen todas ellas en común? Son formas de autocuidado, y no están solas.
El autocuidado es lo que haces para restablecer y aumentar tu bienestar físico, mental y emocional. Puede adoptar muchas formas: dar un paseo, escuchar música, meditar antes de acostarse o simplemente respirar hondo. La frase "autocuidado" tiene un significado especial para mí porque no es algo que nadie haga por mí, soy totalmente responsable ante mí misma.
Tómate un momento para pensar en cómo has practicado el autocuidado recientemente. Lo más probable es que no haya sido en el trabajo. Esto plantea una cuestión importante: ¿por qué reservamos tiempo "fuera del horario laboral" para cuidar de nuestro bienestar cuando pasamos un tercio de nuestra vida en el trabajo?
Dejar tiempo para el autocuidado y no introducirlo a lo largo del día ha pasado factura a los trabajadores estadounidenses de todos los sectores. En una época en la que el agotamiento está en su punto más alto, integrar el autocuidado en la jornada laboral tiene el potencial de marcar la diferencia en nuestras vidas personales y profesionales.
En reconocimiento del Día Internacional del Autocuidado, que este año se celebra el domingo 24 de julio, me pareció esencial discutir por qué, como líderes, es crucial crear una cultura de autocuidado en el lugar de trabajo.
Sería ingenuo por mi parte decir que el autocuidado es la panacea contra el agotamiento, ya que no es algo que deba tomarse a la ligera. Yo mismo he experimentado el agotamiento en mi carrera, al igual que aproximadamente el 77% de los profesionales. En una encuesta reciente realizada por Deloitte, más del 70% de los empleados creen que sus empleadores no están haciendo lo suficiente para prevenir y aliviar el agot amiento dentro de su organización. Muchos impulsores de esta estadística se centran en aspectos de la cultura de la empresa y, con el apoyo de la dirección, pueden mejorar el modo en que los empleados se sienten respecto a sus empleadores. Así pues, aunque el autocuidado por sí solo no solucionará el agotamiento, reconocerlo como una prioridad e integrarlo en la cultura de la empresa puede reforzar la confianza y la conexión de los empleados con la organización y sus directivos, permitiéndoles ser más felices y estar más sanos.
Como empresa dedicada a la salud mental, comprendemos el importante papel que desempeña el autocuidado en nuestra salud general, por lo que hemos puesto en marcha iniciativas para los empleados a nivel de toda la empresa. Introducimos acuerdos de trabajo flexible durante los meses de verano, dando autonomía a nuestros empleados para ajustar su trabajo y salir temprano los viernes. Para algunos, habrá días en los que el estrés sea demasiado, y para ello, estamos orgullosos de ofrecer a todos los miembros de nuestro equipo tres días de salud mental totalmente remunerados y sin limitaciones, ya que es clave que aprovechen este tiempo a su discreción. Lo que más me enorgullece es que ofrecemos a nuestros empleados acceso gratuito a 4 de nuestros productos de salud mental, Sanvello, Digital+, Therapy+ y Concierge Services, donde ponemos en contacto a los participantes con los recursos que mejor se adaptan a sus necesidades. También organizamos sesiones semanales de mindfulness y las archivamos para su reproducción en cualquier momento. Ofrecemos Programas de Asistencia al Empleado a todos los empleados, estén o no acogidos a nuestras prestaciones. Y para quienes deseen apoyar más actividades de bienestar, los empleados pueden unirse al Grupo de Recursos para Empleados Wellness Collective.
Nosotros, como líderes, tenemos el poder, los medios y la responsabilidad de cambiar la narrativa para que los miembros de nuestro equipo disfruten viniendo a trabajar y se sientan cómodos entrelazando a la perfección su vida laboral y personal. Con esto en mente, me pregunto: ¿qué podemos hacer?
Para empezar, mantenga una conversación abierta con sus empleados sobre lo que el autocuidado significa para ellos. Recopilar información sobre la forma en que ven el autocuidado puede ayudar a dar forma a un plan de acción y descubrir lo que más valoran. Algunos pueden disfrutar de clases ocasionales de ciclismo patrocinadas por la empresa, mientras que otros pueden preferir unas horas a la semana para pasarlas con sus familias.
En AbleTo, hacemos todo lo posible por animar a nuestros equipos a que incluyan el autocuidado en su día a día, aunque sea sutilmente. Estas son algunas de las cosas que he encontrado útiles para fomentar una cultura que priorice el autocuidado:
- Establezca límites de tiempo para la comunicación. Anima a los empleados a establecer límites de tiempo y a comunicarlos a los demás. Para ello, indique explícitamente que no espera una respuesta inmediata si envía un correo electrónico o un mensaje fuera del horario laboral, y comuníquelo a su jefe, compañeros de equipo y otras partes interesadas si no puede ponerse en contacto con usted en un momento determinado.
- Dé un paseo durante la reunión. Cuando pueda, celebre las reuniones por teléfono y aléjese de su mesa. Está científicamente demostrado que fomenta el pensamiento creativo y la búsqueda de soluciones, al tiempo que favorece su salud física y mental.
- Apoyar a los empleados en su camino hacia la atención plena. Tenemos la suerte de ofrecer a nuestros empleados sesiones semanales de atención plena dirigidas amablemente por nuestros médicos colegiados. Existen recursos de atención plena, como Sanvello, y herramientas o sesiones útiles que animan a los empleados a bajar el ritmo y respirar. Puedes organizar sesiones de yoga en grupo o incluso introducir breves meditaciones de cinco minutos. Dar el paso de ofrecer esto a sus empleados demuestra su apoyo a su bienestar.
Huelga decir que todos debemos trabajar juntos para construir la cultura. La adopción de cualquiera de las medidas anteriores para incorporar el autocuidado a la cultura de su organización también debe ir acompañada del ejercicio por parte de los empleados de su libertad para expresar sus necesidades. Al acoger la idea de la práctica regular del autocuidado, se abrirá la puerta para que los equipos pongan de su parte en la adopción de esta beneficiosa forma de pensar.
Al fin y al cabo, practicar el autocuidado en el trabajo es parte integrante de la lucha contra la sensación de estrés o agotamiento. Cuando encontramos formas de gestionar nuestra salud mental y física en el lugar de trabajo, podemos sentirnos más relajados y concentrados a lo largo del día. Animar a tu equipo a incorporar una rutina de autocuidado en su día a día, les recuerda que son personas antes que empleados.