6 maneras de romper el ciclo de la comparación

Theodore Roosevelt dijo una vez que "la comparación es el ladrón de la alegría". Tenía razón. Medir constantemente nuestra vida con la de los demás puede causar estragos en nuestro bienestar. Podemos ver cómo ascienden a un amigo y sentirnos estancados en el mismo trabajo que nos gustaba ayer. O enterarnos de que un hermano va a tener su segundo hijo mientras nosotros seguimos tratando de encontrar al elegido. Si siempre estamos comparándonos con los demás, podemos caer en un ciclo de comparaciones. Nos quedamos con la sensación de que nunca hacemos lo suficiente. O peor aún, como si no fuéramos suficientes como seres humanos.

Estos sentimientos son naturales. Los estudios demues tran que nuestros cerebros están programados para medir nuestros progresos con los de nuestros compañeros. Es una forma de aprender unos de otros. Puede ayudarnos a entender cómo encajamos en la sociedad.

Pero cuando se lleva al extremo, compararnos con los demás también puede causar problemas. Puede distraernos de nuestros propios valores y progresos. Y puede minar nuestra autoestima. "Juzgamos nuestras vidas desordenadas comparándolas con los mejores momentos de los demás", dice Oldham. "La verdad es que nadie lo tiene todo resuelto".

Salir de esta rueda de hámster requiere práctica. Pero es posible. Y le mostraremos cómo.

Empecemos explorando cómo 3 conceptos pueden mejorar nuestro bienestar:

• Amor propio
• Autoaceptación
• Autocompasión

A continuación, analizaremos algunas formas en que cada uno de ellos puede ayudarnos a crear nuestros propios puntos de referencia en lugar de fijarnos en otros.

Abrazar el amor propio

El amor propio es un elemento clave para una autoestima sana. Nos pide que celebremos nuestras fortalezas y talentos únicos. También nos invita a ponernos en primer lugar.

"Amar lo que somos aumenta nuestra confianza", dice Oldham. "Es menos probable que gastemos la energía mental o emocional que conlleva el juego de las comparaciones".

Un par de maneras de despertar más amor propio:

• Registra tus victorias. A veces nos cuesta concentrarnos en lo positivo. Para refrescarte la memoria, ten una lista a mano. (Anota las veces que has tenido éxito. O haz una lista de lo que te gusta de ti mismo. Nada es demasiado pequeño para añadir, dice Oldham.
• Anímate. Las afirmaciones y los mantras pueden ser herramientas poderosas para aumentar la autoestima. Pueden ayudarnos a cambiar nuestra mentalidad. Puedes decirte a ti mismo: "Soy suficiente tal y como soy". La clave es hacerlo personal y alineado con tus valores.

Autoaceptación

A la comparación le encanta aferrarse a la duda. Y suele surgir al ver que otras personas alcanzan ciertos momentos vitales que hemos llegado a considerar hitos. Tal vez sea tener un bebé. O hacer un gran viaje. O jubilarse de un trabajo a tiempo completo.

Sea cual sea el objetivo externo, sentimos que deberíamos estar haciendo lo mismo. ¿Y si no lo hacemos? Pues sentimos que no estamos a la altura.

Oldham sugiere, en primer lugar, que nos replanteemos cómo vemos los puntos débiles. Con demasiada frecuencia, las vemos como una lista de cosas que tenemos que cambiar. Eso puede llevarnos a vernos a nosotros mismos como continuos proyectos de bricolaje.

"No es bueno para la autoestima de nadie tener una lista de cosas que hay que mejorar", explica. En lugar de eso, podemos aceptar que todos somos buenos en cosas diferentes. Y tener puntos débiles no significa que tengamos alguna carencia.

Dos métodos para valorarnos tal y como somos:

• Practica la atención plena. Es posible que miremos hacia fuera porque nos cuesta sentarnos con nuestros pensamientos o emociones. La práctica de la atención plena puede ayudarnos a callar a nuestro crítico interior. Podemos aprender a darnos cuenta de creencias inútiles o sentimientos difíciles sin juzgarlos (ni juzgarnos a nosotros mismos). Incorporar la meditación a esta práctica puede ayudarnos a afinar nuestra conciencia. ¿No sabes por dónde o cómo empezar? Consulta la biblioteca de opciones guiadas de AbleTo.
• Céntrate en tus propios objetivos. La próxima vez que te fijes en otra persona, siente curiosidad. ¿Qué te ha llamado la atención? ¿Cómo podría aplicarse a tu propia vida? Por ejemplo, puede que sientas una punzada cuando veas que un amigo publica una foto de su cuadro terminado. Pero cuando te paras a pensarlo, te das cuenta de que en realidad no quieres pintar. Sólo echas de menos sentirte creativo. Eso podría impulsarte a coger tu vieja guitarra. O apuntarte a clases de baile. Se trata de aprovechar lo que te hace sentir bien. Establecer objetivos SMART es una forma de empezar. El diario SMART Goals de AbleTo puede ayudarte.

Fomentar la autocompasión

La autocompasión cambia el juicio por la empatía. En lugar de criticarnos a nosotros mismos, podemos darnos gracia. También significa que nos perdonamos cuando cometemos un error. ¿Y si algo no sale como queremos? Nos animamos, en lugar de culparnos.

La envidia puede ser otro desencadenante de la comparación. Puede que veamos a alguien con una cualidad que admiramos y nos preguntemos por qué no podemos emularla. Pero todo el mundo tiene puntos fuertes y débiles diferentes, y eso es lo que hace que el mundo funcione. "Si todo el mundo fuera médico, no tendríamos casas donde vivir", dice Oldham. "Y profundizando aún más, si todos los médicos fueran cardiocirujanos, ¿quién arreglaría los huesos rotos?".

Aquí tienes 2 formas de tratarte con más ternura:

• Adopta una mentalidad de crecimiento. ¿Quieres enfrentarte a un reto? ¿O aprender algo nuevo? Recuérdate a ti mismo que el progreso lleva su tiempo. Y que el esfuerzo tiene su valor. Si te das cuenta de que estás hablando negativamente de ti mismo, añade la palabra "todavía". Por ejemplo: "No puedo correr 8 km seguidos" se convierte en "Todavía no puedo correr 8 km seguidos". Hacer esto nos ayuda a inclinarnos hacia lo que es posible. (¿Necesitas ayuda para detectar y controlar estos pensamientos? El Diario Guiado de las 3Cs de AbleTo sirve de guía).
• Revisa tus hábitos en las redes sociales. Nuestros feeds nos dan acceso a montones de personas con las que quizá nunca nos hubiéramos cruzado en la vida real. Lo bueno es que puede ayudarnos a encontrar una comunidad. Pero también puede llevarnos a compararnos más que nunca si no lo hacemos intencionadamente. También puede darnos la idea de que debemos ser buenos en todo, incluso si es algo que en realidad no nos importa personalmente. Si tu feed te está causando angustia, utiliza la configuración de límite de tiempo de tu teléfono para frenar tu desplazamiento. Al mismo tiempo, haz balance de a quién sigues. Si hay algún amigo o influencer cuyas publicaciones te hacen sentir mal, quizá sea hora de dejar de seguirlo.

Domar la trampa

Con un poco de esfuerzo y paciencia, podemos tomar medidas para aceptarnos y querernos más plenamente. Y podemos celebrarnos tal y como somos.